La Madre Tierra

Aferrándose a la única carta deNan Dummad, advierte el anciano:
“La Madre brotó acuosay de su espíritu ya éramos trozo.La madre se robusteció despacio, paulatino, sosegado, señora de los tiempos, de semillas de hombres y bestias, de plantas y mares, de rocas y charcos.
No hay, sobre ella, ni un guijarroni una hoja de más.
¡Todo compensado,todo encajado en lo absolutode la armonía y el equilibrio total!
Matas un diminuto colibrí,estremeces con ello,el oscuro vientre de cedro espino, el cobertor del sol, la humedad de los ríos, y el tejido frágil de la selva pariente…
El varón y la mujerno pueden poseer la Tierra,es la Tierra la que los posee,y cuando pretendan lo contrario, vendrá la desolación, el oro y la plata volverán estiércol, y la mierda violentará el universo;
El varón y la mujerson guardianes y garantes de la tierra,que den la mano a la coloradilla,a la tortuga, a la ballena,a la hierbabuena, a la estrella,al viento que desdibuja y fustiga…Todo está empatado, todo acoplado,todo prieto de gracia de Nan Dummad”

Así canta mi pueblo su gloria y poderío:¡Gracias Nan Dummad,porque no pudieron contigo, prosigue eterna,y eterniza contigo al pueblo que te corea!